piel de gallina

¿Por qué se nos pone la piel de gallina?

 

“Pelos como escarpias”;  “erizar el vello”; “pelos de punta”… Más de una vez hemos oído estas expresiones. En realidad son sinónimos de otro dicho todavía más popular, que es el de la famosa “piel de gallina”.

¿A qué nos referimos cuando decimos esta expresión? La piloerección o “piel de gallina” no es otra cosa que una reacción natural del sistema nervioso simpático de nuestro cuerpo ante diversos estímulos. Consiste en la contracción involuntaria de los músculos electores de los folículos pilosos, lo que provoca que el pelo se levante por encima de la piel.

La piel de gallina es fácilmente identificable, ya que cuando aparece, notas que el vello se eriza y ves que la piel pasa a tener un aspecto granulado, como si tuvieras el cuerpo lleno de pequeños granitos.

Como dato curioso, decir que es una respuesta fisiológica que también se da en algunos animales, como los gatos y los chimpancés.

¿Qué es el sistema nervioso simpático?

Es una de las partes en las que se divide el sistema nervioso autónomo que controla los reflejos de tipo visceral y las reacciones de nuestro cuerpo.

La principal función de esta subdivisión del sistema nervioso es preparar al organismo para que pueda responder a los estímulos externos con rapidez.

Algunas de las reacciones que genera son la secreción de adrenalina, la activación del sistema cardiovascular, etc.

¿Qué estímulos originan la piel de gallina?

El vello de nuestro cuerpo se eriza por muchas causas, y todas muy habituales en nuestro día a día, como pueden  ser: un susto, un estremecimiento,  sensación de nervios, sentir frío, verse afectado por emociones muy intensas…

También existen otros estímulos como pueden ser los sexuales.

Este mecanismo reflejo está presente en el ser humano desde la Antigüedad. Como antes el cuerpo estaba cubierto de mucho más pelo, el reflejo piloerector era muy útil para mantener el calor corporal. Esto se explica porque el vello erizado provoca que el pelo se hinche y se convierta en un eficaz aislante del clima.

¿Dónde se produce la piel de gallina?

El cuello y la nuca, los brazos y antebrazos y las piernas son las partes del cuerpo más comunes en las que se suele notar esa sensación.

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